No vendrá la luz

Cuando pequeño, cada vez que se suspendía el servicio de electricidad, todos los vecinos salíamos a la calle, entre "a ver que pasó" y hacer del momento un festejo. Eso era en Boca del Río, ciudad costera con el mismo clima que la ciudad de Veracruz.

A las tres de la tarde de este dia "se fue la luz" en la zona de Xalapa en que vivo. Cuando eso pasó le comenté a mi señora "no creo que tengamos luz el resto del dia y pienso que mañana tampoco", "es domingo, es puente (mañana es día 20, feriado), y está haciendo tremendo frío con llovizna, no creo que aparezca por esta colonia el personal de la CFE, sino hasta el martes".

Ya es de noche y sabemos que cualquiera de las 10 películas que compramos ayer en Liverpool Plaza Américas podría quedarse para mejor momento.

En la tienda de la esquina, el dueño -enconchado por el frío y apenas visible tras el mostrador-, se acompañaba con la aterida luz de dos pálidas velas a punto de deshacerse. Hace un rato le compré un refresco y mientras le pagaba me dice con su quijada titiritante: "siempre tengo música de rockanrol pero ahora ni siquiera tengo un radiecito de pilas", "¿y usted?", sin pensarlo contesté a la primera, mientras me decidía por cacahuates japoneses o enchilados: "escucho a Roxette en la Palm".

Tras apenas perceptible silencio, me suelta la otra pregunta igual de espontánea: "¿y su señora?", le respondo en automático y sin prestar mucha atención a los enchilados: "checando periódicos de internet en el BlackBerry".

Cuando volteo me doy cuenta por la expresión de su rostro que ninguna de las dos respuestas fue entendida.

Rápidamente me cambio el chip del trabajo (sin querer a veces lo traigo hasta en fines de semana) y me pongo el audiocassette de vida cotidiana, comenzando con unos chistes y una plática amigable sobre la diferencia entre la gente de Xalapa y la de la Costa cuando se va la luz.

Con este frío y llovizna absolutamente ningún vecino salió "a ver que pasó" y mucho menos "a hacer del momento un festejo". Xalapa no es Boca del Río y ya han pasado casi 30 años.

Y bueno, ¿qué importa que no haya electricidad? Regresando al departamento pongo una película en la Laptop.

Qué diferente es la gente, en tiempo, en lugar y en sistema operativo.